Familia y valores.

La educación se inicia desde que el niño es apenas un bebé, cuando le enseñamos el significado de dos palabras esenciales: SI y NO, posteriormente los padres irán enseñando al niño normas aparentemente sencillas, tales como saludar, despedirse, decir por favor y gracias, que aunque son fórmulas de cortesía, llevan implícita la fraternidad hacia los demás. Al principio el niño imita el comportamiento de quienes lo rodean, después acepta la autoridad y disciplina que le es impuesta por sus padres y cuidadores.

En un principio todos imitamos la conducta de los demás y conforme se crece se emprende la tarea de regular nuestra propia conducta, haciendo elecciones realmente libres, orientadas al bien personal y al mismo tiempo al bien común, decisiones que le permitirán sentir respeto por sí mismo.

Para poder desarrollar un criterio la persona deberá aprender a buscar coherencia entre sus actitudes, conductas y valores, para desarrollar su carácter y personalidad y la llevara hacerse responsable de su libertad.

Determinar los valores familiares requiere de un  proceso de comunicación entre ambos padres, para decidir qué valores son los más importantes para ambos y de esta forma elegir la estructura de valores de la familiares.

La coherencia entre  palabras y actos es un factor clave para lograr que nuestros hijos se desarrollen como personas integras, honestas y valiosas. Nuestra vida en familia debe estar siempre llena de verdad, amor y confianza.

En conclusión los VALORES FAMILIARES, son aquellos que la pareja o la familia comparten, con los que se identifican. Los principios que aspiran a defender y que les da la unidad familiar.

Cómo todo en la vida es preciso definir un plan en el que participen todos los integrantes de la familia.

Organicen una reunión para que cada uno de los integrantes  aporten ideas para la estructura o escala de VALORES FAMILIARES.

Posteriormente cada integrante deberá justificar porque propone cierto valor, deben darse un espacio para reflexionar y después de esto escriban una lista de 5 valores que les gustaría practicar.

 “Del dicho al hecho, hay mucho trecho”, una vez elegidos los valores, tendrán que definir como practicar cada uno de tal manera que no se sienta pesadez al practicarlo y cada integrante será evaluado por los demás integrantes, esto ayudará que en poco tiempo la familia este realizando en forma muy natural los primero cinco valores que le darán identidad.

Posteriormente se incrementaran otros cinco valores llevando la dinámica mencionada anteriormente y en forma dinámica y natural la familia unida habrá estructurado la escala de valores que la identificará dentro de una sociedad.

Espero que con la participación de todos los integrantes de su familia, puedan llevar a cabo su escala de valores, tan importante para dar identidad a tu familia.